La División de Especiales en Tránsito observó que conductores que cometen atropellos a peatón, luego de fugar, evadiendo su responsabilidad, suelen guardar sus motorizados en garajes, para no ser buscados en sus domicilios.
La instancia policial analiza la posibilidad de sancionar a propietarios de garajes, por presunto delito de complicidad al ser estas los lugares donde se logra reparar un vehículo que registra hechos de tránsito o sobre todo atropellos a peatón.
"Si en la investigación, el fiscal requiere que el propietario de garaje deba ser implicado por complicidad, al no haber denunciado que el vehículo que está arreglando, registra evidencias de atropello a peatón, existe el riesgo, por no denunciar a tiempo, pese a conocer el delito", aclaró el coronel Pablo García.
El responsable de la División Especiales, lamentó que en la mayoría de los casos identificados de "atropello a peatón con fuga", los conductores prefieren evadir su responsabilidad, aprovechando que la mayoría de estos casos, ocurren en vías alejadas, del área periurbana o en carretera. Donde no suele haber testigos o cámaras de seguridad que registre este delito.
"En muchos de los casos, los propietarios de los motorizados que ocasionaron este extremo, buscan un garaje, 'chapista', donde puedan arreglar el hundimiento y luego el lavado del motorizado. En caso de que los propietarios, registraran la existencia de evidencias como prendas enganchadas, sangre alrededor de las abolladuras, en las ruedas o alguna parte del vehículo debe reportar ante la instancia policial de Tránsito", recomendó.
Las investigaciones realizadas por esta unidad, logran llegar a buenos resultados, identificando sobre todo el vehículo protagonista de un accidente de tránsito, que si bien suelen ser de transporte público, son los propietarios del motorizado quienes al final asumen la responsabilidad.
"Los choferes asalariados, pocas veces dan a conocer la comisión de un delito al propietarios y cuando se encuentra los vehículos que son denunciados por testigos, cámaras de vigilancia o por la víctima, son los propietarios quienes terminan pagando, porque los choferes abandonan su servicio", explicó.
En el caso de los atropellos a peatón con fuga, en áreas alejadas del sector urbano, dificulta los procesos de investigación, por no haber testigos o registro de cámaras, razón por la que la instancia de Tránsito, solicita que la población pueda colaborar con denunciar dichos casos, para poder colaborar la investigación.
El atropello a peatón con fuga, se convierte en una problemática social, ante la cantidad de casos atendidos de tres a cuatro hechos por semana, con muerte de las víctimas, como resultado del exceso de velocidad, falta de iluminación y la imprudencia del peatón de tratar de pasar la vía en estado de ebriedad, sin respetar las normas de Tránsito.
