El accidente ocurrió ayer en la mañana, en la avenida Ingavi, cerca del Puente Kyllmann. Es una vía considerada muy peligrosa porque los buses de flotas, camiones y vehículos en general corren velozmente, pese a que hay una escuela de convenio en la zona y niños que entran y salen de la misma.
Según los testigos, José Luis Cabezas circulaba por la avenida Ingavi cuando un taxista que acababa de estacionar su carro frente a un servicio, abrió la portezuela para salir sin percatarse que el motociclista estaba muy cerca. Cabezas, en su afán de esquivar la puerta y evitar un choque, giró el volante hacia la izquierda y se desestabilizó.
“Ha perdido el control de la moto y se cayó, pero por ese carril iba un bus de la flota El Dorado y lo aplastó al joven, le pasó las ruedas encima porque ni lo vio, el motoquero invadió su carril y se cayó por evitar la puerta del taxista”, contó Humberto Cuenca, un hombre que buscaba una chapería por el lugar y fue testigo del siniestro. La víctima murió instantáneamente.
El jefe de la División de Accidentes de Tránsito, coronel Galvin Daza, informó que el fallecido, si bien llevaba un casco de protección, no portaba su licencia y su moto no tenía placas.
“Todo conductor o pasajero de un vehículo debe fijarse bien antes de abrir la portezuela del carro, para proteger a ciclistas y motociclistas de un accidente. Esa es una de las primeras lecciones de educación vial que se enseña en la Escuela de Conductores de Tránsito, para obtener una licencia, pero que, lamentablemente, las personas desconocen o incumplen por descuido, dejadez o desconocimiento con trágicas consecuencias.
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