"El vehículo estaba abasteciéndose de gas natural en la estación de servicio y explosionó por alguna situación que aún no ha sido determinada", informó ayer la supervisora del Comando de la Policía, Susana Rivas.
Según el testimonio de una funcionaria, el chofer del micro Dodge con placa 655 CSK subió al vehículo para pagar y en ese momento se produjo la detonación.
El motorizado quedó totalmente destruido por la onda expansiva y el cuerpo del conductor quedó mutilado.
Rivas explicó que esa explosión no afectó a otras personas, como los funcionarios de esa estación, aunque sí quedó averiado un vehículo que venía detrás.
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), explicó que el vehículo que estalló llevaba un tanque de GNV, además de una garrafa de Gas Licuado de Petróleo (GLP), lo cual está terminantemente prohibido por ser peligroso, irresponsable y clandestino.
“De un rato para otro, sucedió la explosión, fuerte, incluso movió el piso y, en ese momento, lo que hemos hecho es prevenir cerrando las llaves del oxígeno y carburo con el que trabajamos”, contó a Correo del Sur Gregorio Villca, propietario de un taller mecánico que se encuentra justo al lado del surtidor.
Según el testimonio de otro vecino, la funcionaria del surtidor dejó el cargador conectado al tanque e ingresó a las oficinas y eso evitó que corriera la misma suerte.
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